La cámara de fotos desechables para bodas es un detalle original y funcional que transforma la celebración en una experiencia compartida. No se trata solo de fotografiar, sino de conservar la mirada de quienes vivieron vuestro amor desde cerca.
Diseño elegante y personalizable
Cada cámara se viste con un papel adhesivo verjurado de textura elegante y tacto especial. Este revestimiento aporta una sensación de calidad y armonía visual, integrándose con la decoración de la boda sin romper la estética del evento.
Podrás personalizar tanto la parte delantera como la trasera de la cámara, incluyendo frases, nombres y fechas que la convertirán en un recuerdo completamente vuestro.
Fotografía analógica con alma
La magia de la cámara desechable para boda reside en su capacidad para atrapar instantes auténticos. A diferencia de los móviles o cámaras digitales, el carrete impone pausa y atención. Cada foto es una elección, una emoción que no se puede borrar.
Disponible con 27 o 39 exposiciones, para que cada invitado capture una pequeña historia dentro de vuestra gran historia.
Tamaño y comodidad
De formato compacto y ligero, cada cámara mide 12 × 7 × 4 cm, perfecta para colocar en las mesas, el rincón del photocall o junto al libro de firmas.
Su tamaño la hace cómoda de usar y fácil de sostener incluso para los más pequeños, permitiendo que todos participen en este juego visual.
Un recuerdo que trasciende el tiempo
Revelar las fotos se convierte en una ceremonia en sí misma: abrir el sobre, mirar las imágenes una a una, reír y emocionarse al recordar cada momento.
El detalle de cámara desechable para bodas no solo captura fotos, sino la esencia del día, a través de las miradas de quienes más queréis.